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El Gobierno Vasco considera “prematuro” determinar el efecto de las últimas restricciones sobre la economía

Azpiazu explica que la “volatilidad” derivada de la pandemia dificulta las estimaciones sobre la recaudación y la actividad

VITORIA, 3 (EUROPA PRESS)

El consejero de Economía y Hacienda del Gobierno Vasco, Pedro Azpiazu, ha afirmado que la “incertidumbre” y la “volatilidad” derivadas de la pandemia de coronavirus hacen que sea muy complicado determinar cuál puede ser la evolución de la economía vasca, por lo que ha considerado “prematuro” cuantificar, en estos momentos, el efecto que puedan tener las restricciones aprobadas en las últimas semanas sobre la recaudación fiscal y sobre otros parámetros de la actividad económica.

Azpiazu, que ha presentado en Vitoria el número especial de la ‘Ekonomiaz-Revista Vasca de Economía’ editado con motivo del 25º aniversario de la publicación, ha recordado que este próximo viernes se darán a conocer las ‘Cuentas Económicas Trimestrales’ de Euskadi correspondientes al periodo comprendido entre julio y septiembre.

El consejero ha afirmado que desconoce los datos recogidos en el informe trimestral del Eustat, aunque ha considerado que serán similares a los contemplados en el avance estadístico publicado a finales de octubre, que con un crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) del 15,2%, dibujaba una “mejoría evidente” respecto a un segundo trimestre que fue “nefasto” en términos económicos.

De esa forma, ha afirmado que no es “previsible” que los datos que se publiquen este viernes puedan llevar al Gobierno Vasco a tener que revisar sus últimas previsiones económicas.

Azpiazu también se ha referido a los efectos que puedan tener sobre las estimaciones de recaudación fiscal las restricciones aprobadas en las últimas semanas para contener el avance de la pandemia, entre las que se incluye el cierre de la hostelería o la limitación del horario comercial hasta las nueve de la noche.

El consejero ha explicado que el indicador sobre el PIB que se dará a conocer este próximo viernes puede ser un indicador “importante” en este sentido, si bien ha precisado que es necesario tener en cuenta otra serie de indicadores. Por ese motivo, ha afirmado que en estos momentos sería “prematuro” determinar cuál puede ser la repercusión de las nuevas medidas preventivas frente al coronavirus sobre las previsiones de cierre de recaudación.

DATOS “POSITIVOS” DE EMPLEO

Azpiazu ha manifestado que los últimos datos sobre la evolución del paro y de la afiliación a la Seguridad Social en el País Vasco son “bastante positivos”, aunque ha insistido en la importancia de no limitarse a analizar “datos puntuales”, dado que es necesario realizar un estudio “conjunto” de todas las estadísticas disponibles para tener una impresión “más cabal” de la evolución de la economía.

El consejero ha subrayado que, en un contexto como el actual, es especialmente relevante permanecer “vigilantes”, dado que “no es nada fácil” vaticinar cuál puede ser la tendencia de la economía. “Decir lo que va a pasar es muy difícil, teniendo en cuenta la situación de incertidumbre y volatilidad”, ha manifestado.

Por otra parte, ha explicado que la comisión interdepartamental para la elaboración y coordinación de los proyectos que presentará Euskadi para acceder a los fondos europeos para la recuperación económica sigue trabajando en diseñar una propuesta. Azpiazu ha recordado que el “compromiso” del Gobierno Vasco es aprobar esta propuesta “antes de final de mes”. “A ver si logramos los recursos que todos deseamos”, ha manifestado.

“HUELLA DE LA GRAN RECESIÓN”

El especial de la ‘Revista Vasca de Economía’ presentado por Azpiazu analiza el impacto de la anterior crisis económica sobre Euskadi. Este ejemplar, titulado “Huella de la Gran Recesión en Euskadi. Impactos y retos principales de País”, constata que la crisis iniciada en 2007 “ha dejado una huella imborrable” sobre la economía vaca.

A estos efectos, según se ha explicado en la presentación, se les añaden los retos que se han de afrontar en esta nueva crisis, en esta ocasión de origen sanitario, conformando un escenario que “ha hecho tambalear los cimientos de la economía y las reglas del juego con las que hemos venido actuando hasta la fecha”.

Esta entrega de la publicación, editada con motivo del 35º aniversario de ‘Ekonomiaz’, se estructura en cinco bloques. Un primer grupo de artículos aporta un diagnóstico de la economía vasca y del comportamiento del sector financiero tras la ‘Gran Recesión’, para lo que plantea los retos a los que se enfrentaba Euskadi antes de la actual pandemia. Los autores de los textos asumen que el cambio de escenario “requerirá una revisión” de los mismos, dado que la situación se ha visto modificada de forma “abrupta”.

SERVICIOS PÚBLICOS “DE CALIDAD”

Un segundo bloque de artículos aborda la cuestión de la gobernanza a diversas escalas, tanto pública como privada, ante la necesidad de adaptarse a los nuevos retos. Los siguientes bloques son temáticos, y están enfocados a los retos para 2030. Así, el tercer grupo de artículos recoge el conjunto de políticas destinadas a “robustecer la capacidad de resiliencia” de la economía vasca, para lo que se subraya la importancia de contar con servicios públicos “de calidad” que atiendan las necesidades de la ciudadanía en materia de sanidad, educación, trabajo y protección social.

El cuarto bloque recoge aquellas políticas sectoriales o temáticas más estrechamente relacionadas con la transformación energético-ecológica, que ha sido definida como “palanca” para la recuperación económica tras la pandemia. Finalmente, en el quinto bloque se describe el grado de digitalización de la economía vasca y su evolución sectorial.

El director de ‘Ekonomiaz’, Jordi Campàs, ha afirmado que Euskadi se enfrenta en la próxima década al reto de “sentar las bases y las trayectorias de prosperidad de la economía vasca para los próximos 50 años”. Para lograrlo, ha apelado a la responsabilidad e implicación de los agentes económicos y sociales.

En este contexto, ha subrayado la necesidad de “recuperar la inversión y aprovechar al máximo los recursos disponibles para alinearlos de forma coherente y consistente con los retos futuros que actúan como palancas de transformación y de prosperidad sostenible”.


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