Reclama incentivos al consumo, como “un sistema de bonos” para consumir más en empresas españolas
MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
El presidente de la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM), Miguel Garrido, ha destacado este miércoles en la Asamblea de Madrid que “es preciso y urgente que se pongan en marcha medidas que ayuden a salvar a empresas y autónomos”, entre las que ha destacado “ayudas directas y a fondo perdido” y bajadas de impuestos, “no meras moratorias”.
Garrido ha afirmado durante una comparecencia en la Comisión de Economía, Empleo y Competitividad que la crisis sanitaria provocada por el coronavirus ha supuesto “un cataclismo sin precedentes” tanto en la economía española como en la madrileña.
“Nuestro sólido y sano tejido empresarial se encuentra ahora, como el resto de la sociedad, débil y precario, pedimos por tanto que seamos atendidos, cuidados y ayudados para salir de esta situación y volver pronto a la senda de crecimiento y creación de empresas”, ha manifestado.
Garrido ha señalado que Madrid partía de “una situación privilegiada”, ya que el PIB madrileño representa el 19,3% del nacional, por delante de Cataluña, y además la región representa el 15,7% del empleo, al tiempo que lidera la creación de empresas y la atracción de inversión extranjera.
Según sus palabras, eso se debe a la competitividad de sus empresas, la política económica y fiscal de corte liberal e incentivadora de la actividad desarrollada por los gobiernos regionales en los últimos años, la seguridad jurídica y confianza en las administraciones y el clima de concertación y diálogo social existente en la región que genera confianza en los agentes económicos y en los inversores.
No obstante, ha indicado que “la grandeza de Madrid, generada por la importante concentración de población, su apertura internacional y su privilegiada situación geoestratégica hicieron que fuera la primera comunidad de España en sufrir la pandemia y a la que con más saña esta sacudió”, lo que junto al peso del sector servicios explica que la caída del PIB madrileño se situara en un 26,4% en el segundo trimestre frente al 21,5% del conjunto del país.
A juicio de CEIM, las medidas adoptadas por el Gobierno de España durante el primer confinamiento, que consistieron en “facilitar liquidez” ante una “parada brusca pero temporal”, mediante aplazamientos de impuestos, créditos ICO y ERTES, posibilitaron a las empresas “postergar sus obligaciones sin romper la cadena de pagos”, de manera que fueron “útiles para afrontar un problema temporal”, pero “se han mostrado claramente insuficientes para una crisis sin precedentes” como esta.
Según los cálculos de CEIM, “se va a perder entre un 10 y un 15% del PIB en el año 2020 y, por mucho que las previsiones oficiales digan lo contrario, en el 2021 probablemente no se recupere ni siquiera la mitad de esa pérdida”.
Entretanto, ha señalado Garrido, “en España no se han articulado apenas ayudas directas ni bajadas de impuestos que permitan salvar de su desaparición a decenas de miles de empresas y autónomos, por lo que la destrucción del tejido empresarial va a ser, está siendo ya, una tragedia con un altísimo coste en puestos de trabajo para el conjunto de la sociedad”.
AYUDAS PARA LOS SECTORES MÁS DAMNIFICADOS
En concreto, ha solicitado “ayudas directas y a fondo perdido que ayuden a las pymes de los sectores más damnificados por las restricciones a la actividad a cubrir sus necesidades de tesorería y sus gastos corrientes, tales como salarios, alquileres de inmuebles, pago de hipoteca, suministros”, entre otros.
Asimismo, ha abogado por bajadas de impuestos y “no meras moratorias que únicamente posponen el problema”, rechazando “frontalmente las medidas contempladas y aprobadas en los Presupuestos Generales del Estado para 2021 de subida de impuestos y creación de nuevos tributos”.
Para CEIM, a nivel nacional se debería bajar el Impuesto sobre Sociedades a las empresas afectadas por la pandemia y el IRPF a los autónomos, así como “eliminar” el Impuesto de Patrimonio y “bonificar al máximo” el de Sucesiones y Donaciones.
“Contra la pretensión conocida en las últimas semana, se debería imitar la política fiscal madrileña que ha tenido como consecuencia que en Madrid haya más actividad, se genere más riqueza, haya mayor renta, se produzca mayor recaudación, menor déficit y, por lo tanto, se haya incrementado la aportación para financiar el resto de España”, ha agregado, al tiempo que ha señalado que Madrid es la Comunidad autónoma más solidaria.
Asimismo, ha solicitado “eximir o bonificar el pago de las cotizaciones a la Seguridad Social y de manera automática en el caso de los autónomos”, y ha apuntado que con la tasa de desempleo “más alta de Europa”, especialmente juvenil y de larga duración, “no parece tener sentido” que haya “uno de los impuesto más altos del continente precisamente al empleo”.
También ha reclamado estímulos a la demanda y al consumo, como “un sistema de bonos a los ciudadanos para consumir más en las empresas españolas en crisis”.
Finalmente, ha destacado la necesidad de “flexibilizar el sistema de los ICOS”, con “periodos de carencia y de amortización más amplios en función de las necesidades de las empresas”, y de “mejorar el sistema del concurso de acreedores, de forma que constituya un instrumento efectivo que contribuya a garantizar la continuidad de las empresas y que modifique la injusta prelación de pago a los proveedores, de forma que las administraciones públicas sean las últimas y no las primeras en cobrar”.
“SE HAN HECHO COSAS, SE TIENEN QUE HACER MÁS COSAS TODAVÍA”
En respuesta a los grupos parlamentarios, ha aclarado que no piden ayuda al Gobierno de España “exclusivamente” sino a todas las Administraciones y ha puesto en valor las medidas aprobadas por el Ayuntamiento de Madrid para el sector hotelero. “Se han hecho cosas, se tienen que hacer más cosas todavía”, ha agregado Garrido.
Por otro lado, ha reconocido que el Gobierno regional, en la segunda ola, ha tomado “una decisión muy valiente, muy comprometida, de apostar por la apertura de la actividad económica, al comprobar que los focos de los contagios no estaban en la actividad empresarial”, sino “en las actividades familiares y sociales, en el ámbito privado”.
A su juicio, lo que se ha hecho en el conjunto de España ha sido “un disparate”, al “cortar por lo sano, que es una manera de quitarte la responsabilidad”.
“Para mí esa es la gran ayuda y la gran política y la gran acción que ha hecho el Gobierno de la Comunidad de Madrid diferente al resto de España”, ha añadido, para subrayar el coste que supone la paralización de la actividad económica.
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