Bruselas llama a actuar para evitar que los bancos acumulen préstamos dudosos “durante años”

BRUSELAS, 19 (EUROPA PRESS)

El vicepresidente económico de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, ha enfatizado este martes la “urgencia” de actuar para evitar una escalada de préstamos dudosos en los balances de los bancos o, de lo contrario, las entidades financieras acumularán estos activos tóxicos “durante años”.

“Unos balances bancarios deteriorados durante un mayor periodo de tiempo en una crisis perjudicaría la recuperación económica. Si fracasamos esta vez, los NPL (préstamos dudosos, por sus siglas en inglés) crecerán durante años”, ha advertido en una rueda de prensa tras la reunión telemática de los ministros de Finanzas de la UE (Ecofin).

El letón ha presentado a los responsables económicos de los Veintisiete el último plan de acción del Ejecutivo comunitario para buscar una salida a los créditos improductivos, a pesar de que “gracias a las ayudas que han dado los Estados miembros”no se ha detectado un aumento de su nivel ni de los procedimientos de insolvencia empresarial.

Sin embargo, Dombrovskis ha explicado que la pandemia “ha tenido un impacto masivo en la economía” y ha frenado la “tendencia a la baja” que hasta ahora era visible en la evolución de los préstamos dudosos que los bancos tienen en sus balances.

“Por eso presentamos el plan de acción, necesitamos actuar con urgencia”, ha dicho. “Es esencial que los bancos sigan prestando a la economía real y apoyando la recuperación. Europa todavía está en un shock económico”, ha subrayado.

La Comisión desveló a mediados de diciembre su estrategia, en la que renunció a crear un ‘banco malo’ europeo que acumulase los activos tóxicos de las entidades financieras del bloque. A cambio, se abrió a explorar la creación de una red que conecte las compañías nacionales de gestión de activos, como la Sareb española.

Además, el plan de acción aboga por desarrollar los mercados secundarios para que los bancos puedan deshacerse de estos activos tóxicos, reformar las leyes nacionales sobre procesos de insolvencia y concursos de acreedores y, si es necesario, destinar recursos públicos para ayudar a atajar el problema.