VALLADOLID, 19 (EUROPA PRESS)
El sindicato UGT ha advertido este viernes del aumento de accidentes laborales mortales en Castilla y León por las deficiencias en la organización del trabajo junto a la ausencia de inversiones empresariales en prevención de riesgos laborales.
A pesar del descenso del 19,89 por ciento relativo de la siniestralidad total, la secretaria de Salud Laboral y Política Social de UGTCyL, Azucena Pérez, ha criticado “la paralización de todas las políticas públicas en prevención de riesgos laborales” con unas consecuencias “nefastas” en términos de mortalidad laboral en la Comunidad.
En este sentido ha recordado que 2020 ha terminado con 75 trabajadores fallecidos en Castilla y León y ha apuntado que “detrás de buena parte de estos accidentes de trabajo se esconde la precariedad laboral y la inestabilidad en el empleo”.
“Si unimos esto a la poca o nula prevención en riesgos psicosociales y a la falta de prevision o adaptación por parte de las empresas de la conciliación de la vida laboral y personal, tenemos como resultado en este mes siete personas trabajadoras fallecidas (tres por lesiones no traumaticas, dos tráficos en jornada de trabajo, uno por golpe como consecuencia de caída de la persona trabajadora y uno más en accidente ‘in itinere’)”, ha apostillado Pérez.
También ha hecho referencia a la estadística relativa a la comunicación de las enfermedades profesionales, señalando que la reducción experimentada este mes con respecto al mismo periodo del año pasado (-61,82 por ciento) pone de manifiesto “la infradeclaración de este tipo de enfermedades”, lo que supone “un claro perjuicio para las personas trabajadoras y la sociedad en su conjunto”.
Ante esta situación, Azucena Pérez considera necesario “un refuerzo inmediato del cuerpo de Inspectores de Trabajo” ante el “escaso control” por parte de la Inspección de Trabajo debido al aumento de su carga de trabajo por los ERTE.
La secretaria de Salud Laboral y Política Social de UGTCyL ha terminado señalando que “casi el 50 por ciento de accidentes de trabajo se dan en empresas de menos de 25 personas trabajadoras, muchas de ellas sin representación sindical”, por lo que ha que incidido en que “la presencia sindical en los centros de trabajo sigue siendo la mejor garantía para el ejercicio de los derechos y para la protección de la salud de la clase obrera”.
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