UGT atribuye el ascenso de los precios a la “volatilidad” de los productos energéticos

MURCIA, 14 (EUROPA PRESS)

La Unión General de Trabajadores (UGT) ha manifestado este miércoles, tras conocer los últimos datos del Índice de Precios al Consumo (IPC), correspondientes a marzo, que el “significativo ascenso” de precios se debe fundamentalmente “a la volatilidad de los productos energéticos”.

Según el análisis del sindicato, la tasa de inflación subyacente, que no tiene en cuenta los productos energéticos y alimentos no elaborados, se mantiene en una tasa de crecimiento moderada (0,4%), lo que permite “mucho margen de maniobra” a las políticas públicas de corte expansivo.

No obstante, ha indicado que estos productos son también bienes de consumo imprescindible para las familias, por lo que el aumento de su precio “no es inocuo para ellas, especialmente para las más vulnerables, que en las circunstancias actuales pueden ver agravada su situación”.

En este contexto, la elevación de los salarios y, en particular, del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), “resulta absolutamente necesaria y carente de las repercusiones negativas que la Patronal le prende atribuir”, ha aseverado.

Para UGT, subir el SMI “no sólo supondría mejorar las rentas de las personas trabajadoras que se encuentran en una peor situación y permitirles afrontar estos incrementos de precios en productos básicos, sino también aumentar su consumo y, con ello, la actividad económica, con carácter general”.

Con la misma lógica, ha apuntado que las transferencias sociales y las prestaciones públicas y, especialmente, el Ingreso Mínimo Vital (IMV) y la Renta Básica de Inserción (RBI), “son instrumentos que deberían mejorarse en cuanto a la agilización de su concesión, su cuantía y compatibilidad para asegurar la adecuada cobertura de sus necesidades básicas a las personas que peor lo están pasando”.

Para ello, así como para “estimular una recuperación económica que mire al futuro con algo de certidumbre o confianza”, el sindicato ha detectado la necesidad de resolver “la absoluta parálisis que afecta a la gestión pública regional como consecuencia de la situación política y la ausencia de presupuestos”.

“La rémora que supone esta situación no sólo está ralentizando que empresas y familias trabajadoras salgan de la crisis, sino también haciendo crecer, irresponsablemente, el riesgo de que las dificultades sobrevenidas con la pandemia se tornen estructurales”, ha apostillado UGT.