VALÈNCIA, 22 (EUROPA PRESS)
Hosteleros de la Comunitat Valenciana han protagonizado el acto central de las protestas del décimo día de la acampada del ocio nocturno ’13A’ ante el Palau de la Generalitat para reclamar, despertadores en mano y sonando al unísono, que la comisión interdepartamental COVID de este jueves alargue su horario de cierre hasta el toque de queda a las diez de la noche y que empiece “la verdadera cuenta atrás” para la desescalada del sector.
Con este gesto, la Coordinadora Empresarial de Ocio y Hostelería de la Comunidad Valenciana (CEOH) denuncia que las pymes hosteleras no pueden seguir “ni una semana más” con facturaciones medias del 32%, un 67% menos de lo habitual en tiempos pre-COVID, y que su capacidad de resistencia llega “al límite” tras tres meses de severas restricciones y un mes de cierre total.
Su objetivo es que el gobierno valenciano “despierte ya” y extienda el horario de cierre a las 22 horas porque “trabajar con cualquier otra franja es inviable y esta situación es una “auténtica pesadilla para los hosteleros”.
Otras de sus peticiones son la ampliación del aforo en interiores al 50% mínimo y la recuperación del servicio en barra, como ya trasladó en las dos últimas mesas de trabajo para la desescalada del sector, con la Conselleria de Sanidad y la secretaría autonómica de Turismo.
Todas estas medidas deberían entrar en vigor el próximo lunes 26 como paso previo al final del estado de la alarma, previsto por el Gobierno para el 9 de mayo, cuando “la hostelería y el ocio deben avanzar hacia la normalidad”.
Desde esta patronal insisten en que los datos sanitarios de la Comunitat, con la incidencia más baja de España y gran parte de Europa, la Generalitat debe atender las peticiones de un sector que ha perdido 1.017 millones de euros en el primer trimestre del año, ha sufrido el cierre definitivo del 30% de sus establecimientos en un año y la destrucción de cerca de 40.000 puestos de trabajo directos e indirectos.
18.000 TRABAJADORES DEJARÍAN DE ESTAR EN ERTE
En la misma línea, la Confederación Empresarial de Hostelería y Turismo de la Comunitat Valenciana (CONHOSTUR) reclama a la interdepartamental que permita la ampliación de horario de actividad hostelera hasta el toque de queda. Esto permitiría, según sus cálculos, la desafección del ERTE de 18.000 trabajadores del sector.
Rechaza así que el Consell alargue solo el horario de terrazas hasta las 20 horas y exige, por contra, que se prolongue también en interior hasta el toque de queda para evitar que se produzca un “agravio comparativo” entre establecimientos con o sin mesas en la calle.
A su juicio, esta ampliación permitirá retomar el servicio de cenas, al menos en un turno, y repercutirá de forma muy positiva en el empleo, ya que hay alrededor de 33.000 trabajadores de hostelería todavía en ERTE a causa de las restricciones.
Si mejora el tiempo, esta patronal considera que se podrían evitar así concentraciones de personas en la vía pública realizando actitudes ilegales como botellones, dado que estarían en locales o terrazas hasta las 22 horas consumiendo.
“La hostelería valenciana ha demostrado un gran esfuerzo y responsabilidad en esta desescalada, pero ahora ha llegado el momento de que se atiendan las peticiones”, reivindica en su comunicado, advirtiendo que si siguen las restricciones se trasladan los encuentros sociales al ámbito privado con fiestas ilegales. Por todo ello, urge a que las decisiones de la interdepartamental atiendan a criterios técnicos y objetivos y no a “decisiones políticas”.
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