La Cátedra Monnet de la UAO cree que Europa tiene potencial de “tercera superpotencia mundial”

BARCELONA, 7 (EUROPA PRESS)

El director de la Cátedra Jean Monnet sobre Integración Fiscal en la Unión Europea de la Universitat Abat Oliba CEU (UAO CEU), Juan Corona, ha afirmado que una Europa unida tiene potencial para ser “la tercera superpotencia mundial”.

En un comunicado este viernes, la institución ha apostado por una unión “que profundice en la unidad política y cuente con fórmulas de gobierno que le permitan actuar con una sola voz en la escena internacional”.

Así, Corona ha apuntado que Europa puede competir excepto en el plano militar contra Estados Unidos y China, y ha advertido también de que hay dificultades para hacer valer el peso específico: “Europa, por sus valores, no impone nada. Y mientras nosotros estamos debatiendo, el resto de superpotencias actúa”, ha declarado.

Corona ha señalado la integración fiscal como uno de los objetivos en los que ha de progresar la UE y ha confiado en que ideas como la tributación patrimonial no tengan cabida en el programa “sensato y razonable” por el que apueste la Comisión para los fondos de reconstrucción.

El experto también ha aludido a la contención de movimientos nacionalistas y populistas como otro de los grandes objetivos inmediatos del europeísmo: “Es algo que me preocupa especialmente, sobre todo pensando en los jóvenes”, ha dicho.

En la misma jornada, el Coordinador del Centro de Política de la Competencia y Regulación del Real Instituto Universitario de Estudios Europeos de la Universidad CEU San Pablo, Jerónimo Maíllo, ha destacado la “valentía y la solidaridad con mayúsculas” que inspira la aprobación de los Next Generation UE.

Respecto a la vacunación, ha defendido la fórmula de la compra y la distribución coordinada, que ha evitado que se produjeran desigualdades entre países miembros que habrían sido difíciles de asumir.

A su vez, la profesora de Empresa y Economía Eva Perea ha lamentado la “lenta y complicada” gobernanza europea, con ejemplos como el acuerdo bilateral de inversiones entre China y la UE, que ha requerido siete años de negociaciones y, en su opinión, puede que nunca llegue a aplicarse.