De la Concha reitera al Ministerio que la pesca de arrastre de Baleares “no puede asumir nuevas restricciones”

PALMA, 21 (EUROPA PRESS)

La consellera Agricultura, Pesca y Alimentación, Mae de la Concha, ha reiterado este lunes a su homólogo en el Gobierno estatal, Luis Planas, que la pesca de arrastre de Baleares “no puede asumir nuevas restricciones”, como plantea el reglamento europeo previsto para 2022.

En el Consejo Consultivo de Política Agraria y Pesquera celebrado por videoconferencia, la consellera balear ha explicado al ministro Planas que la pesca de arrastre de las Islas ha reducido el esfuerzo pesquero en un 35 por ciento, en horas y flota.

Según De la Concha, la reducción del 40 por ciento hasta 2025 planteada por Europa “no es asumible por el sector pesquero de Baleares”.

La consellera ha explicado que la GSA5, la zona a la que pertenecen las Baleares, cuenta con 11 reservas marinas y con 34 barcas de arrastre. “Se trata de una zona que se debe tratar de manera diferenciada, por la singularidad y la sostenibilidad de la pesca”, ha defendido.

SEQUÍA

La consellera ha aprovechado también este encuentro para tratar la sequía meteorológica que afecta a Baleares, especialmente a Mallorca y Menorca.

De la Concha explicó que la falta de lluvias afecta a los cultivos de forraje, y obliga a los ganaderos a importar la comida para el ganado. Esto “supone una doble penalización para los ganaderos, con el sobrecoste que implica para la insularidad”.

En este sentido, la consellera balear ha explicado al ministro Planas que el sector de la leche en la Comunidad es uno de los afectados por la sequía y remarcó que seis vaquerías de Mallorca han obtenido recientemente el certificado de bienestar animal.

“La Conselleria da los pasos para lograr una mayor soberanía alimentaria en Baleares y no nos podemos permitir que se debiliten sectores como el de leche”, ha recalcado.

Durante la reunión también han tratado las negociaciones de la Política Agraria Común (PAC) para el periodo 2023-2027; y la suspensión de los aranceles a productos agroalimentarios entre los Estados Unidos y la Unión Europea en los próximos cinco años. La consellera ha recibido con satisfacción la noticia porque en Baleares afectaba a sectores como el del queso y el del vino.