SEVILLA, 29 (EUROPA PRESS)
La Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta de Andalucía, a través del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM), ha sellado un año más su colaboración con el patrocinio de los Cursos de Verano que celebra la Universidad Pablo de Olavide (UPO) en Carmona (Sevilla) y que cumplen este año su decimonovena edición donde la defensa de los derechos de las mujeres constituye un valor fundamental en los seminarios.
Según han informado en un comunicado conjunto, la consejera, Rocío Ruiz, y la vicerrectora de relaciones institucionales y fundaciones, Laura López, han acudido al acto celebrado en la universidad este martes.
La colaboración de la Consejería de Igualdad con los Cursos de Verano de Carmona se remonta a 2017. Desde esta fecha, dicho apoyo se ha concretado en la celebración de seminarios de diferentes áreas de conocimiento en los que “la defensa de los derechos de las mujeres ha constituido una pieza esencial”, ha indicado la Junta.
Este compromiso por la defensa de los derechos de las mujeres y la lucha contra todo tipo de discriminación por razón de género une a la consejería y a la institución académica.
Así, la oferta formativa de los cursos de la UPO en Carmona supone también un “reflejo de esta apuesta por la igualdad de género, posicionando a estos cursos de verano como referentes de la concienciación y defensa del principio de igualdad”.
Los títulos por los que apuesta la Consejería de Igualdad en la oferta académica festival de esta edición son: ‘Educar para la igualdad. El único camino’ (5-7 de julio), ‘Intervención social con personas en riesgo de exclusión’ (5-7 de julio), ‘Mujer, empleabilidad y emprendimiento: retos y oportunidades’ (12-14 de julio), ‘La situación de la víctima de trata en tiempos del covid-19’ (15-16 de julio) y ‘Sexualidad (es) e intervención socioeducativa. Más allá de la prevención’ (26-27 de julio).
La consejera ha subrayado que “se trata de un catálogo amplio y diverso que tiene un denominador común: generar conocimiento para profesionales que trabajan con personas, profesionales que día a día están en primera línea contra las múltiples desigualdades de la sociedad como los delitos de odio, la violencia de género o la exclusión social, entre otros”. “Es vital que la generación de conocimiento para la práctica, para la intervención social y comunitaria, venga de la mano de las universidades”, ha agregado.
Asimismo, ha felicitado a la Universidad Pablo de Olavide “por la organización de estos cursos, su programación diversa y la filosofía que se deja entrever en toda la programación, que es el respeto y el fomento y defensa de los derechos humanos”.
Por su parte, la vicerrectora de Relaciones Institucionales y Fundaciones, Laura López de la Cruz, ha indicado que, aunque las “grandes transformaciones sociales en materia de igualdad en España han ocurrido de la mano del legislador” y que “a través de la educación y de la formación se ha seguido avanzado en el cambio social2”, la “asignatura pendiente” en materia de igualdad son “las desigualdades sutiles que sufren las mujeres, especialmente en el ámbito laboral, que son más manifiestas a medida que subimos peldaños en la escala social”.
Para López de la Cruz, el debate, la reflexión y la denuncia académica son imprescindibles para poner freno a estas situaciones de injusticia.
COMPROMISO DE LAS UNIVERSIDADES PÚBLICAS ANDALUZAS
Asimismo, Rocío Ruiz ha añadido que con este acuerdo se refuerza “el compromiso con todas las universidades públicas de la comunidad como agentes clave para conseguir esa Andalucía que avanza y no deja a nadie atrás, una Andalucía igualitaria y libre de violencias machistas”.
No en vano, las universidades son protagonistas en el ‘Plan Estratégico para la Igualdad de Mujeres y Hombres en Andalucía’ que impulsa la consejería, a través del Instituto Andaluz de la Mujer.
“Este plan nace con la misión de establecer las directrices, los objetivos estratégicos y las líneas básicas de intervención que orientarán las actividades de todos los poderes públicos en Andalucía, incluidas las universidades, en materia de igualdad entre mujeres y hombres, con el fin último de alcanzar la democracia paritaria y la plena incorporación de las mujeres en orden a superar cualquier discriminación social, política, económica o laboral”, ha destacado Ruiz.
En este sentido, este plan supondrá un marco común que afectará a todas las consejerías del gobierno andaluz, a sus entidades instrumentales, a las universidades públicas, así como a las entidades locales, que deberán desarrollar sus propios planes específicos de igualdad en función de las directrices que marcará dicha estrategia.
Asimismo, Rocío Ruiz ha puesto de relieve que otra de las líneas de trabajo con las universidades que se ha reforzado es el programa Univergem, que tiene como objetivo promover actuaciones innovadoras y contextualizadas desde la perspectiva de género en las universidades públicas de Andalucía, incentivando el empleo, autoempleo y emprendimiento de las mujeres universitarias y favorecer la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres.
“Por ello, ya hemos publicado las nuevas bases reguladoras y próximamente haremos lo mismo con la convocatoria, donde hemos mejorado y reforzado este programa según las necesidades y las peticiones de las propias universidades, que son quienes lo ejecutan. Hemos introducido la transferencia de conocimiento, al ser una apuesta de las universidades por incorporar el conocimiento generado a través de sus actividades e investigaciones a una cadena de valor capaz de lograr un retorno económico, con el propósito de que pueda ser aplicado por el sector productivo o por la sociedad en general. Por tal motivo, hemos de procurar que el conocimiento generado a través de este programa trascienda el ámbito académico a fin de incorporarlo a la cultura empresarial y social”, ha agregado.
Además, otro de los aspectos mejorados está relacionado con la evaluación, ya que se ha diseñado una herramienta de seguimiento y evaluación que tendrá que presentar cada Universidad junto con el proyecto a subvencionar. “El objetivo es evaluar y comprobar el impacto real de las medidas, de los proyectos, para poder potenciar aquellos que tienen un gran impacto y poder analizar y modificar aquellos que tienen un menor impacto en la población diana”, ha concluido Ruiz.
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