BRUSELAS, 22 (EUROPA PRESS)
La Comisión Europea ha señalado este jueves que la política energética en la Unión Europea se coordina entre los Veintisiete, después de que Alemania haya cerrado un acuerdo con Estados Unidos sobre el proyecto del gasoducto Nord Stream 2 al que inicialmente se opuso la Administración del presidente Joe Biden al considerar que se trataba de una iniciativa que Rusia podría usar para ganar influencia.
“No es un proyecto que sea del interés común europeo”, ha señalado en rueda de prensa el portavoz de Energía de la Comisión Europea, Tim McPhie, quien ha enfatizado que la gestión del gasoducto debe realizarse de forma transparente y de acuerdo a las normas comunitarias.
Después del acuerdo alcanzado por Washington y Berlín, el Ejecutivo comunitario ha enfatizado que la política energética del bloque “no es solo una cuestión nacional” y ha recordado que necesita de la coordinación entre la UE y los Veintisiete. “La Comisión quiere discutir con los Estados miembros los detalles de la implementación de este acuerdo, para asegurar que cualquier medida está bien coordinada y en espíritu de solidaridad”, ha apuntado McPhie.
El acuerdo permitirá finalizar la infraestructura que lleva gas ruso hasta Alemania a través del Báltico, a la que inicialmente se opuso la Administración del presidente Joe Biden al considerar que se trataba de una iniciativa que Rusia podría usar para ganar influencia. Como contrapartida, Alemania se ha comprometido a tomar medidas para garantizar que no hay efectos adversos en Ucrania, país dependiente del gas ruso.
NADIE PUEDE COMPROMETER GASTOS DE LA UE
En este sentido, Berlín ha asegurado fondos para apoyar la seguridad energética en Ucrania e inversiones en el margen del presupuesto de la UE, algo que también ha contestado la Comisión al señalar que cualquier partida que salga de las cuentas europeas debe seguir el debido proceso. “Ningún Estado miembro puede comprometer gastos del presupuesto de la UE”, ha zanjado la portavoz principal del Ejecutivo comunitario, Dana Spinant, al ser preguntada por este tema.
Sobre las quejas que ya han expresado países como Ucrania, que ha pedido consultas con Alemania y la Comisión Europea para tratar el acuerdo sobre Nord Stream, Spinant ha señalado que Bruselas está lista para discutir el asunto con Kiev, si bien no ha recibido todavía una carta formal.
Kiev es el gran perjudicado en esta situación, pues entiende que la decisión de no frenar la infraestructura crea una “amenaza política, militar y energética para Ucrania y Europa Central”. Según un comunicado conjunto de los Ministerios de Exteriores de Ucrania y Polonia, el pacto “incrementa el potencial de Rusia de desestabilizar la seguridad en Europa y perpetúa las divisiones entre miembros de la OTAN y la UE”.
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