OVIEDO, 6 (EUROPA PRESS)
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha defendido este lunes en una conferencia en Oviedo la necesidad de subir el salario mínimo interprofesional (SMI) y ha rechazado los argumentos de aquellos que dicen que ha de afrontarse ese incremento solo en función de una buena situación económica.
“El SMI hay que subirlo precisamente cuando la situación económica es peor”, ha defendido Díaz, señalando que eso es precisamente lo que se ha hecho en Estados Unidos y otros países.
Díaz se ha pronunciado en estos términos en la Escuela de Verano de UGT Asturias en un acto bajo el título ‘Nuevo marco de relaciones laborales’ que ha compartido con el secretario general de UGT, Pepe Álvarez. Los dos se han elogiado mutuamente tanto en lo personal como en lo profesional.
Actualmente se sigue negociando la cuantía del incremento, pero Díaz se ha comprometido a que al final de la legislatura, haya o no haya acuerdo, habrá una subida hasta el 60 por ciento del salario medio. “No hay ningún dato empírico que demuestre que subiendo el SMI se destruye empleo”, ha resaltado.
Díaz, en la línea de las declaraciones que viene haciendo durante el fin de semana, ha admitido que le da “mucha tristeza” las críticas que escucha a esa subida. “Habría que hablar de los salarios vergonzantes de muchas personas que tienen la poca ejemplaridad de dar lecciones a los demás”, ha comentado, insistiendo en que el SMI lo cobran las personas más necesitadas.
Más allá del SMI, Yolanda Díaz se ha comprometido a tener aprobada la nueva reforma laboral y “publicada en el BOE” antes de que termine el presente año. Ha dicho que la reforma laboral que hizo el PP en 2012 ha hecho un “daño brutal” y ha supuesto “la mayor devaluación salarial del país”.
El objetivo de Díaz es conseguir “plantillas estables y trabajos de calidad”. Es necesario cambiar el actual modelo basado en la precariedad, ha señalado. También ha dicho que tiene previsto acometer las medidas necesarias para que la subcontratación “no sirva como elemento de especulación o abaratamiento de costes”. Ha añadido que también habará que afrontar la situación de las empresas de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). “Algún día tendremos que hablar de la SEPI”, ha señalado.
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