PAMPLONA, 9 (EUROPA PRESS)
El consejero de Ordenación del Territorio, Vivienda, Paisaje y Proyectos Estratégicos del Gobierno de Navarra, José María Aierdi, ha calificado de “buena noticia” el convenio firmado con el Arzobispado por el que cede 13 viviendas para que puedan ser arrendadas en alquiler por Nasuvinsa y ha esperado que sea “una referencia” para que se extienda con otras entidades.
En respuesta a una pregunta de EH Bildu en el pleno de la Cámara foral, Aierdi ha explicado que este acuerdo con el Arzobispado “nace después de un proceso que llevábamos ya tiempo para la puesta en valor del máximo de viviendas en desuso”, lo que llevó al departamento a ponerse en contacto con particulares y otros grandes tenedores.
En este sentido, ha valorado “muy positivamente” el convenio con el Arzobispado, el primero que se ha conseguido firmar con una de estas entidades propietarias de viviendas, y ha esperado que se extienda a otras entidades para que “crezca esa bolsa de alquiler de manera importante”.
“Las condiciones que ofrecemos son las mismas, cualquier persona que pone su vivienda en manos de Nasuvinsa cobra 5 euros por metro cuadrado útil de esa vivienda”, ha expuesto el consejero.
Según ha dicho, el convenio alcanzado con el Arzobispado “va a permitir poner en valor viviendas que en este momento están en desuso y hacerlo a un precio como el resto de viviendas de la bolsa de alquiler”. Y ha considerado que este acuerdo va a ser “una referencia” para otras entidades, para más viviendas del propio Arzobispado y para “abrir una línea de colaboración también con las personas físicas”.
Por su parte, el portavoz de EH Bildu Maiorga Ramírez ha remarcado que la Iglesia “va a recibir dinero por la cesión de viviendas” y ha censurado los “excesos comunicativos” del Gobierno foral a este respecto. “Es una buena noticia, pero que no venga la Iglesia con milongas. Si se trata de que la Iglesia quiera lavarse la cara, que empiece devolviendo lo que injustamente ha inmatriculado”, ha expuesto Remírez.
A su juicio, “el tema de la vivienda es muy serio”, por lo que “no se debe caer en estos juegos comunicativos improcedentes que no hacen sino buscar que una institución se lave la cara”.
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