Vodafone evitó la emisión de 110.195 toneladas de CO2 en España en su último año fiscal

MADRID, 13 (EUROPA PRESS)

Vodafone España evitó la emisión de 110.195 toneladas de CO2 durante el ejercicio fiscal 2021, que se desarrolló entre abril de 2020 y marzo de 2021, debido al uso de energías renovables en sus instalaciones y la gestión de la movilidad del personal, entre otros puntos.

En el campo de la movilidad, la compañía ha sustituido 613 vehículos de su flota por otros de emisiones bajas y ha instalado puntos de recarga en sus sedes.

Adicionalmente, la operadora calcula que los servicios de Internet de las Cosas desarrollados y comercializados por la misma evitaron la emisión de otras 665.712 toneladas del gas gracias a sus funciones que mejoran la sostenibilidad como la medición inteligente del consumo o las aplicaciones en ciudades inteligentes.

La suma de ambas cifras (775.917 toneladas) supone aumentar en un 18% el ahorro del año fiscal anterior.

100% ENERGÍA RENOVABLE

El último ejercicio fue el primero en el que la empresa consiguió consumir energía 100% renovable y adquirida en España gracias a un acuerdo con Iberdrola con la que firmó un acuerdo de compra de potencia (PPA) de 140 GWh, a lo que hay que sumar la instalación de placas solares y otras instalaciones fotovoltaicas, como una ‘smart flower’, en su sede en Madrid, que le permite producir 560 MWh al año de energía.

Esto supone un paso clave hacia el objetivo de la operadora de reducir sus propias emisiones de carbono a ‘cero emisiones netas’ en 2030 y en toda su cadena de valor en 2040.

Las medidas de eficiencia implementadas en la red, como la renovación tecnológica de su red móvil o la consolidación y virtualización de su red ‘core’, han reducido en un 29,9% el consumo

Además, la modernización de equipos de energía antiguos ha supuesto ahorrar en consumo, ya que cuentan con tecnologías de alimentación y refrigeración más sostenibles.

A nivel internacional, el Grupo Vodafone se ha comprometido a facilitar a sus clientes la reducción de 350 millones de toneladas de carbono entre 2020 y 2030 (lo que equivale la huella ambiental anual de un país como Italia).