CÓRDOBA, 28 (EUROPA PRESS)
La directora del Departamento de Empleo, Diversidad y Protección Social de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Rosa Santos, ha afirmado este jueves en Córdoba que “la reforma que se pretende por parte del Gobierno introduce una serie de rigideces en el mercado laboral” que en la CEOE entienden que “serían muy perjudiciales” para la empresas y los trabajadores.
En este sentido y en declaraciones a los periodistas antes de participar en una reunión de la junta directiva de la Confederación de Empresarios de Córdoba (CECO), Rosa Santos ha explicado que dicho perjuicio alcanzaría a “la capacidad de adaptación de las empresas en sus procesos, en esas transiciones imprescindibles como consecuencia de la digitalización y de la ecologización de la economía”, y sería negativo “también para los trabajadores”.
De hecho, según ha recordado, “en España uno de cada tres trabajadores carece de cualquier tipo de cualificación, con la cual, evidentemente, requerimos herramientas que permitan esa formación y esa recualificación permanente de los trabajadores”, además de “herramientas para la empresa de flexibilidad, sobre todo interna, que nos permitan adaptarnos a esos procesos y conservar el empleo”, porque “el objetivo compartido de todos”, según ha señalado, es que no se pierdan puestos de trabajo.
Rosa Santos, que ha pilotado las negociaciones sobre los ERTE o el teletrabajo, entre otras, con el Gobierno y los sindicatos, en representación de la CEOE, y que también defiende los intereses y posiciones de la patronal en las mesas de diálogo social para la reforma laboral, entre otras, ha señalado que ésta última “es una reforma que el Gobierno persigue, tanto como consecuencia del pacto de gobierno, como por los compromisos que adquirió con Europa, con relación al Plan de Recuperación y, básicamente, estamos trabajando sobre la contratación, con el objetivo de país de intentar reducir la temporalidad”.
Ésta, según ha asegurado, es una cuestión en la que los empresarios están “comprometidos”, pero pretenden “ser quirúrgicos” y “muy cuidadosos, para no poner patas arriba el mercado laboral y que no provoque un efecto de contracción de la contratación, o incluso de incremento del desempleo”.
Se trata, según ha detallado Rosa Santos, de “una serie de medidas que afectarían a la flexibilidad interna”, siendo “imprescindible” para la CEOE “intentar conservar lo que está en la legislación actual”, para así “poder adaptarnos a los necesarios cambios”, analizándose también en la negociación “una serie de medidas relacionadas con la negociación colectiva, la ultraactividad y la prioridad aplicativa de convenios”.
En cualquier caso, para la CEOE “el principal objetivo es mantener los mecanismos de flexibilidad interna de las empresas”, pues “son los que se necesitan para afrontar, tanto la transición que es consecuencia de la digitalización, como la transición ecológica, que es un reto que el mundo empresarial tiene que afrontar de inmediato, y que exigen como dos elementos nucleares la formación continua y la recualificación permanente de los trabajadores”, junto con la “capacidad de adaptabilidad y de flexibilidad de las empresas para ajustar todos los procesos productivos y adaptarse rápidamente a esos cambios”.
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