PALMA, 8 (EUROPA PRESS)
La Biblioteca Pública de Palma ha renovado su dirección después de la jubilación de Maria de Lluc Alemany, que ocupó el cargo durante más de treinta años, y ha nombrado a Carolina Guayta como nueva responsable.
Según ha informado en nota de prensa, la Conselleria de Fondos Europeos, Universidad y Cultural, la nueva responsable, es diplomada en Biblioteconomía y Documentación y licenciada en Documentación por la Universidad Carlos III.
Nacida en Palma, es usuaria de la biblioteca desde muy pequeña y trabaja como técnica bibliotecaria de la sala infantil desde hace 15 años.
Los últimos años ha ofrecido un especial apoyo a la dirección en la gestión económica, la cooperación y la representación institucional.
Según han explicado, vista la naturaleza de la plaza, que puede ser ocupada por funcionarios de carrera de cualquier administración, la Dirección General de Cultura abrió una convocatoria para cubrirla, solicitando a los candidatos un proyecto de dirección y un currículum.
Al concurso se han presentado cinco personas, de las que se ha evaluado la experiencia en la gestión de bibliotecas, la titulación especializada en Biblioteconomía y Documentación y la presentación de un proyecto solvente de dirección.
De este proceso ha resultado la elección de Carolina Guayta para ocupar la plaza en comisión de servicios.
Desde la Dirección General de Cultura han agradecido a Maria de Lluc Alemany todos los años de trabajo dedicados, primero en la anterior sede de la biblioteca, en la Casa de Cultura en la calle de Ramon Llull, y los últimos años en el edificio de Can Sales.
AUTOPRÉSTAMO
La renovación en la dirección llega meses después de la implantación de un nuevo sistema de autopréstamo en la biblioteca, que ha permitido agilizar y modernizar el servicio: la gestión el préstamo de documentos, la renovación y consulta de manera totalmente autónoma, sin tener que pasar por el mostrador de préstamo.
Esta tecnología contribuye a aumentar la capacitación digital, la autonomía, reducir el tiempo de espera y garantizar la privacidad de la lectura.
Además de automatizar la gestión del préstamo, el nuevo servicio ha mejorado el control de seguridad y ha simplificado los inventarios, puesto que permite incorporar en una misma etiqueta el elemento identificativo y el de seguridad.
El control de seguridad es más fiable, y permite la obtención de datos estadísticos más detallados.
El autopréstamo se ha puesto en marcha mediante la Identificación por Radiofrecuencia –Radio Frequency Identification– (RFID), un sistema de gestión de materiales que permite transmitir datos a través de ondas de radio con etiquetas que no necesitan contacto con el sistema de lectura.
Las etiquetas y los lectores RFID han sustituido los sistemas con códigos de barras y las alarmas magnéticas.
Can Sales tiene en marcha obras por valor de 650.000 euros de rehabilitación del tejado de la biblioteca y la puesta a punto de la climatización del edificio, a cargo del Ministerio de Cultura.
- Te recomendamos -
