MADRID, 25 (SERVIMEDIA)
Repsol alcanzó un beneficio neto de 969 millones de euros en el primer trimestre de 2024, un 12,9% menos que en idéntico periodo de 2023, cuando se anotó 1.112 millones. La caída se explica por el descenso del precio del gas.
Según la información remitida por la compañía energética a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el resultado ajustado, que mide específicamente el funcionamiento de los negocios, sumó 1.267 millones de euros, un 33% menos que un año antes.
Por su parte, el beneficio bruto de explotación (Ebitda) alcanzó los 2.143 millones de euros, un 20,5% menos que un año antes, con una caída del 30% en términos ajustados.
Además, las ventas de la compañía se redujeron un 1,4%, hasta los 15.083 millones de euros, y la deuda neta se elevó a 3.901 millones, un 86,1% más que al cierre de 2023.
Por negocios, Exploración y Producción obtuvo 442 millones, un 6,8% menos; Industrial 731 millones, un 42,8% menos, y Cliente 156 millones, un 10,3% menos. Generación Baja en Carbono perdió 6 millones.
La compañía invirtió entre enero y marzo 2.129 millones de euros, incluyendo la compra en Estados Unidos del promotor de energías renovables ConnectGen.
Repsol presentó el 22 de febrero su Actualización Estratégica 2024-2027, que fija las prioridades y objetivos para reforzar su crecimiento rentable, consolidar su apuesta multienergética y alcanzar sus objetivos de descarbonización.
En los primeros meses del año, Repsol ha dado pasos decisivos para profundizar en la descarbonización de sus negocios. Destaca el inicio de la producción a gran escala de combustibles renovables en su nueva planta de Cartagena.
En el periodo 24-27, la compañía prevé invertir entre 16.000 y 19.000 millones de euros netos: un 60% dedicado a la Península Ibérica y más de un 35% a proyectos bajos en carbono.
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