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Juntos por la Vida habilita un centro de acogida para mujeres y niños en la frontera con ayuda de Levante UD

La ONG alquila un hotel en el campo a diez kilómetros de la frontera para ofrecer “un espacio seguro y de paz”

VALÈNCIA, 5 (EUROPA PRESS)

La Fundación Juntos Por la Vida, con la ayuda y colaboración del Levante UD, pondrá en marcha en la frontera de Polonia con Ucrania un centro de acogimiento y alojamiento transitorio seguro para unas 50 personas ucranianas –madres con sus hijos– que huyen de las zonas de conflictos de su país, durante al menos seis meses, en la localidad polaca de Przemysl (Polonia).

La ONG valenciana está acondicionado el edificio para acoger ya a los primeras familias cuanto antes. Ha alquilado un antiguo hotel situado en el campo, a solo 10 kilómetros de la frontera, “con las condiciones adecuadas para poder acoger a las personas que han salido de Ucrania huyendo de las bombas y el miedo”, ha explicado en un comunicado.

La mayoría de las mujeres y menores en Ucrania se han desplazado de sus hogares y las personas con menos recursos siguen abandonado sus casas buscando zonas seguras a ambos lados de la frontera. Son personas que no tienen vínculos en otros países europeos y no desean alejarse de Ucrania, precisa la presidenta de Juntos Por la Vida, Clara Arnal, que se encuentra en la frontera con Ucrania con un equipo de voluntarios.

“Sobre todo son mujeres jóvenes con sus hijos que tuvieron que dejar sus casas. Por eso es para nosotros una prioridad alojarlos cerca de la frontera, cerca de su país, pero lejos del horror de la guerra. Aquí encontrarán un espacio seguro y en paz. También tendrán atención psicológica, y habrá jardines y espacios para juegos para niños”, ha indicado Arnal.

El Levante UD y la Fundación del Levante UD ‘Cent Anys’ están llevando a cabo la campaña ‘Granotas solidarios con Ucrania’ para captar fondos para sufragar los gastos de este alojamiento. Ha invitado a participar en la campaña a todo el levantinismo para que pueda colaborar con el proyecto con su aportaciones económicas.

El objetivo es alcanzar 76.800 euros para poder sufragar los gastos de alquiler, acondicionamiento y manutención de las familias acogidas en el centro.

La fundación Juntos Por la Vida trabaja en la frontera de Polonia y Ucrania tras la invasión rusa, en Przemysl, donde sus voluntarios colaboran en la evacuación de refugiados, les atienden cuando llegan y organizan su traslado en autobús, además de coordinar la ayuda humanitaria. También ayudan y atienden a los desplazados que deciden quedarse en la frontera.

El equipo de voluntarios en la frontera está compuesto por ocho personas, cuatro españoles y cuatro ucranianos. En Ucrania hay otros 20 voluntarios del país trabajando en los procesos de evacuación y otro equipo de voluntarios en València organiza la recepción y el acogimiento de los que llegan para ofrecerles una vida tranquila en paz.

En su campaña de emergencia por Ucrania, Juntos por la Vida ha organizado y facilitado hasta ahora el traslado a la Comunitat Valenciana de alrededor de 1.000 personas de familias ucranianas, especialmente madres y niños y niñas.

La mayoría son acogidos por familias porque tienen vínculos familiares o de amigos, pero también hay muchas familias sin vínculo que se han ofrecido para acoger, y en otros casos se les facilita otro tipo de alojamiento. La ONG valenciana también ha facilitado el traslado de cientos de refugiados organizados desde la frontera, en colaboración con otras ong a otras ciudades españolas.

Juntos por la Vida lleva 25 años realizando programas de acogimiento humanitario en la Comunitat Valenciana durante los veranos y navidades, principalmente con menores ucranianos de la zona de Chernóbil, por la catástrofe nuclear, y desde hace unos años también de la zona de Donbas, que son acogidos por familias.

En este momento y ante la situación de guerra en su país, muchas de esas niñas que venían hace años han vuelto a ser recibidas por sus mismas familias de acogida. Ahora ya son adultas y vuelven con sus propios hijos y otros familiares, huyendo de los bombardeos y del miedo.


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