Mendia destaca que Euskadi ha recuperado ya el el 82% del empleo destruido durante la pandemia
BILBAO, 2 (EUROPA PRESS)
La vicelehendakari segunda y consejera de Trabajo y Empleo del Gobierno Vasco, Idoia Mendia, ha destacado que Euskadi ya ha recuperado el 82% del empleo destruido durante la pandemia y ha afirmado que esa recuperación se ha debido a que la base de la economía vasca es “sólida” y el descenso del paro “consistente y constante” desde septiembre.
En una comparecencia junto al viceconsejero de Empleo e Inclusión, Alfonso Gurpegui, para valorar los datos del desempleo en Euskadi en agosto, la vicelehendakari ha atribuido que Euskadi haya iniciado la recuperación económica antes que otras comunidades autónomas a que, en Euskadi, “la respuesta ha sido más rapida e intensa desde hace un año porque el tejido económico vasco es diferente al resto de comunidades, donde la salida se produjo a partir de primavera por la vacunación y la incidencia de la recuperación del turismo se empezó a notar”.
Para Mendia, Euskadi “está mas vinculada al sector industrial y por eso el despegue y la recuperación en el empleo ha sido más constante e intensa”.
Sin embargo, se ha mostrado esperanzada porque, aunque “el tejido económico vasco, tanto empresas como trabajadores, ha sufrido muchísimo, hay en marcha proyectos de futuro y unos recursos añadidos a través de los fondos europeos”.
Mendia ha indicado que en esta ocasión, más allá de la valoración de los datos de agosto, su departamento ha querido ofrecer una mirada general sobre la evolución del empleo en Euskadi en estos últimos doce meses marcados por la crisis económica provocada por la pandemia.
En este sentido ha recordado que se ha cumplido un año desde que Euskadi alcanzó “el pico de desempleo” provocado por la pandemia y, en este tiempo, se han visto muchas cuestiones que contienen más información sobre lo que ha pasado y, sobre todo, de aquello en lo que hay que incidir como gobierno para “lograr una salida justa de esta crisis”.
COMPARACIÓN CON 2008
En su análisis, Mendia ha indicado que la subida del paro en 3.058 personas registrado en Lanbide en agosto eleva a 122.260 las personas que buscan empleo y no lo encuentran y suponen 5.021 más que en el momento en el que empezó la crisis, hace año y medio, y 24.190 menos que hace un año, cuando se alcanzó el máximo en Euskadi.
La vicelehendakari ha recordado las cifras de paro en agosto en los años previos, cuando en 2018 se registraron en agosto 123.606 y en 2019, cuando fueron 116.078.
En esa comparativa, Mendia ha afirmado que Euskadi todavía no ha recuperado todo el empleo perdido, pero “las cifras son similares a años económicos considerados buenos en su momento. Por tanto, un “primer hecho relevante” es que, en este año, en términos de paro registrado,se ha recuperado el 82% del empleo destruido en esta crisis”, ha destacado.
Sin embargo, ha añadido, frente a la paulatina destrucción de empleo de la crisis de hace una década, en esta ocasión los Gobiernos “han sabido dar la vuelta a los peores augurios” y contenido la destrucción de empleo con una “inmensa” inversión pública, además de haber contado con los agentes sociales para hacerlo posible a través de los ERTEs.
En este punto ha remarcado que la figura de los ERTEs “han sostenido el empleo de 188.000 personas en Euskadi, y el 95% de esa cifra ya se ha reincorporado”.
La vicelehendakari ha comparado la evolución del paro con las cifras de la crisis anterior, entre 2008 y 2009, cuando la destrucción de empleo fue de más de 60.000 personas y continuó una pendiente constante hasta 2012, que cerró con 169.083 personas paradas en Euskadi.
A partir de entonces, en los dos años siguientes, se redujo esa cifra en unas 2.000 personas anualmente. Sin embargo, en esta crisis por la pandemia, Euskadi ha tenido “meses de reducción de más de 6.000, y en un año hemos conseguido reducirlo en más de 24.000” ha destacado.
En su opinión, las tres grandes diferencias entre ambas crisis han sido, en primer lugar, “el tiempo de respuesta; porque los procesos tanto de destrucción, como de recuperación del empleo han sido diferentes, mucho más rápidos en la actualidad.
ERTEs
En segundo lugar, la aplicación de mecanismos de sostenimiento del empleo ERTEs, y que deben ser un referente de protección de empleo futuro y, por último, la activación de las corrientes de fondo que estaban caracterizando nuestro mercado de trabajo, como las nuevas ocupaciones y formas de trabajo.
A partir de estas valoraciones, Mendia ha anunciado que el Gobierno vasco mantiene para al actual legislatura el reto de reducir el paro por debajo del 10% y ha recordado que, según la última encuesta del Eustat relativa al segundo semestre situaba la tasa en junio en el 10,3 y que se cerró 2020 en el 11,4, tras conseguir rebajarla en un 1,1% en seis meses.
Sobre estas cifras, Mendia ha recordado que en junio de 2020 se hablaba de una destrucción posible de 68.000 empleos en ese ejercicio y que en septiembre se corrigió a 30.000. En cambio, ha proseguido, “el año cerró con 15.000 desempleados más” que son “muchísimos más de los que quisiéramos pero, muchísimos menos de lo pronosticado”, se ha congratulado.
El reto de reducir el paro por debajo es doble, ha apuntado, porque a él, habría que añadir que “tenemos que crear las condiciones para recuperar el empleo de calidad, inclusivo e igualitario”.
DÉFICITS
En este punto Mendia ha afirmado que no se pueden ocultar “los grandes déficits” que arrastra el mercado laboral en Euskadi desde antes de que estallara esta crisis, como son, “la altísima temporalidad y la parcialidad no deseada, la precariedad en la que están instaladas gran parte de las mujeres y los jóvenes, y la cronificación del desempleo”, ha enumerado.
Para superarlos, ha aludido a la necesidad de un nuevo Estatuto de los Trabajadores que “ponga coto a esas formas de contratación que impiden un proyecto de vida”, para lo que espera que sea posible el acuerdo en la Mesa de Diálogo Social en España.
Por todo ello, Mendia ha destacado que se ha sabido resistir esta crisis con una respuesta “sin precedentes” cuya principal lección es “el valor de lo público y el diálogo social como fórmula de éxito”.
En este punto ha anunciado que esa reflexión la va a compartir tanto con la representación de los empresarios como de los sindicatos más representativos y es lo que quiere hacer al empezar el presente curso, de cara a abordar como retos inmediatos, “el empleo de calidad y unos presupuestos ambiciosos”, de lo que ha anunciado que tiene intención de hablar con los agentes sociales en los próximos días.
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